La casa del ”Nuevo Rico” era residencia temporal de Alonso Lorente Yúfera, alcantarillero que, a partir de los años 30 del siglo pasado, consiguió una gran fortuna como contratista de obras, primeramente en Madrid y con posterioridad en Murcia y Alcantarilla. La vivienda, edificada en la década de los 40, se ubicaba formando esquina con las calles Nona y Pasos. De ella destacaban los miradores semicirculares que se adaptaban a las dos calles, abriendo su visibilidad a la calle Mayor.
El maestro de obras encargado de su construcción fue el alcantarillero José Sánchez Martínez, “Maestro Olivares” que, durante años trabajó en las construcciones promovidas por el “Nuevo Rico”, así como en el edificio de la esquina con la calle Mayor, con planta baja destinada a comercio, donde se ubicaba el “Ocaso”, proyectado por el arquitecto Joaquín Dicenta Vilaplana.
En la calle Nona, la casa del “Nuevo Rico” lindaba con otra vivienda de su propiedad. A continuación, la panadería del “Mamaíto” y uno de los edificios modernistas más representativos de Alcantarilla: La Casa de Basilio Antonio Cobarro Tornero, atribuida al arquitecto Pedro Cerdán. El industrial procedía de una familia de Abarán establecida en la Villa a finales del siglo XIX para dedicarse a la exportación de fruta y a la industria conservera. Con el tiempo, Basilio Antonio Cobarro llegó a ser uno de los industriales más importantes de la Región en el siglo XX.
La calle de los Pasos, donde después se construiría la Casa del “Nuevo Rico“, fue el lugar donde el tranvía hacía una parada de la línea de Murcia-Alcantarilla, hasta el año 1929.
La casa del “Nuevo Rico” fue derribada en el año 2004, quedando parte del solar de propiedad municipal.